Habla testigo de ataque a profesor de karate en Calera de Tango: "Vi al tipo salir corriendo, era menor de 20 años"


Alrededor de las 19:00 horas de este jueves, el profesor de karate Claudio Báez Rubio recibió cinco impactos de bala cuando impartía clases en el gimnasio del Estadio Calera de Tango, en la Región Metropolitana.
Claudio Báez Rubio tiene 56 años. Es cinturón negro 6° Dan en el estilo Shotokan, y es una figura emblemática del karate en el país. Además es campeón nacional, sudamericano y panamericano y entrenador nacional.
El matinal del 13, 'Tu Día', conversó con una vecina del sector, madre de una niña que participaba en el taller, pero que este jueves no asistió. "A mi hija no la mandé al taller de karate por el frío, yo vivo casi al frente, cerca a nosotros tenemos un negocio. Yo me dirigí al negocio cuando siento los disparos, yo sentí tres disparos", declaró.

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Habla testigo de ataque a profesor de karate
La mujer aseguró que "vi al tipo salir corriendo, era un tipo menor de 20 años, andaba con capucha con polerón canguro. Cruzó la calle, un camión casi lo arrolla, andaban en un vehículo plomo sin patente. Lo estaba esperando un tipo arriba".
Según su declaración, tras sentir los disparos y ver la huida del sujeto, se resguardó tras un arbusto, sin conocer que el profesor había sido la víctima del ataque.
"(Estamos) todos muy asustados, la gente no va a querer mandar a sus hijos a ningún taller. No tenemos seguridad, el número de seguridad no funciona, uno llama después de las 11 de la noche y cortan llamados. Yo he llamado más de tres veces cuando hemos tenido problemas porque se juntan autos acá afuera para el intercambio de drogas, nosotros llamamos a las 11:30 de la noche y cortan, ellos trabajan hasta las 3 de la mañana", denunció la vecina de Calera de Tango.
Sobre el profesor Claudio Báez, la mujer manifestó que "es una persona súper tranquila, una persona de casa. Es una persona de edad, tranquila, un hombre de familia. Él lleva muchos años trabajando en la comuna, es una persona conocida por sus clases".
En el lugar habían menores de edad, que fueron testigos del ataque al karateka. "No tienen respeto, entran a una sala donde hay muchos niños, entre 10 a 12 niños, entre 10 a 17 años. El trauma para esos niños de ver cómo el profesor de karate que es una persona fuerte, que los va a cuidar, se ve involucrado en esto, está súper mal", reflexionó.
"Hay muchos niños que contaron que donde a él le llegaron los impactos de bala, los uniformes quedaron manchados con sangre, entonces el trauma de los niños", manifestó la mujer.