El Ministerio de Salud defendió la estrategia del gobierno luego que Reino Unido anunciara la detección de una nueva variante del coronavirus, que se caracteriza por ser más contagiosa que la detectada hace un año en Wuhan, China.
Esto luego de las críticas recibidas por entidades como el Colegio Médico, quienes desde el 20 de diciembre venían solicitando medidas más estrictas en el aeropuerto de Santiago, punto desde donde ingresó dos días después una ciudadana cuyo test PCR confirmaría la presencia de la nueva variante.
La subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza, remarcó que "las nuevas variantes están en estudio permanente, y virus están en constante mutación. Lo segundo, que reiteró la OMS, es que no se puede penalizar o estigmatizar a países que están haciendo muy bien su trabajo, que es secuenciar los virus".
"Y la OMS reitera en forma permanente que el cierre de fronteras no soluciona el problema, sino que reforzar las medidas que estamos tomando en cada uno de los países", enfatizó Daza.
La subsecretaria de Salud Pública enfatizó que "el mismo dia que el reino unido alertó de esta nueva variante, inmediatamente decidimos tomar emdidas como la prohibición de entrada de extranjeros que hubieran estado en Reino Unido, la suspensión de vuelos directos".
"Y a las personas chilenas, que no podemos prohibirles el ingreso, porque son connacionales, hicieran una cuarentena de 14 días", agregó.
Daza enfatizó que frente a la nueva variante, "fortalecimos la estrategia de vigilancia y fortalecimos el testeo en el aeropuerto, que permitió detectar oportunamente este caso, trazarlo y aislarlo oportunamente".
En tanto, el jefe del ISP, Heriberto García, aseguró que "si no hubiéramos hecho esta vigilancia, no habríamos detectado la cepa".
"Si Chile no estuviera preparado para hacer esta secuenciación, no la hubiéramos detectado.Toda PCR positiva se manda al ISP y la secuenciamos", detalló.
En este caso, la muestra fue identificada como parte de la nueva cepa el 28 de diciembre.
