Sicario colombiano de Antofagasta que se había vuelto pastor evangélico fue detenido: arriesga 100 años de cárcel
Una peligrosa banda de origen colombiano cayó en Antofagasta. Su líder, un hombre con formación en las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), ya estaba preso, pero faltaba la detención del “Chimuelo”, el hombre identificado como el más violento del grupo.
Se trata de Leandro Preciado, conocido como “Chimuelo”, o como el “Arcángel de Zeus”, por ser el brazo derecho del líder Javier Valencia, conocido precisamente como “Zeus”.
Según informó Reportajes T13, la banda operaba en el campamento Génesis de Antofagasta, donde instalaron incluso algunas casas de tortura. El “Chimuelo” es acusado de tortura, sicariato y extorsiones, delitos que habría cometido en aquella toma.
La Policía de Investigaciones (PDI) identificó al “Chimuelo” como quien “actuaba” en nombre de “Zeus”, quien era el cerebro de la organización.
“Es un sujeto sumamente de confianza de ‘Zeus’ que los actos más violento eran indicados para que él los cometiera, es más, hay un acto sumamente relevante que tiene lugar en marzo de 2024, donde un ciudadano colombiano es sometido a un acto de tortura en una habitación o domicilio destinado para tal efecto y dominado por ‘Zeus’", relató el subcomisario de la Brigada de Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado Pablo Santos.
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El caso de marzo del 2024 tuvo como víctima a otro ciudadano colombiano, quien incluso sufrió la pérdida de una de sus extremidades.
“Actos de tortura en donde principalmente efectuan disparos en contra de este sujeto y le propinan golpes con elementos contundentes y aplican corriente en sus extremidades que ocasiona que pierda una de estas”, agregó el subcomisario.
Rebelión en la banda criminal y la transformación del “Chimuelo”
Poco antes de la detención de parte de la banda criminal, se produjo una rebelión encabezada por el “Raspao”, que buscaba destronar a “Zeus”.
La PDI, sin embargo, logró detener a la mayor parte de la banda, incluido a Zeus y el “Raspao”, pero no al “Chimuelo”, quien nunca se supo qué bando había tomado.
“Cercano a la fecha de la detención de estos sujetos ocurre una rebelión de parte de algunos de los integrantes de la organización criminal en contra de su líder ‘Zeus’ por la violencia que ejercía sobre sus pares, sobre sus propios integrantes de la organización, lo que genera una toma de poder y una expulsión del campamento que termina con un homicidio", explicó Santos.
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El jefe de la PDI de Antofagasta, Jorge Aguillón, contó que el “Chimuelo” desapareció del radar en ese entonces, y tuvo un cambio en su vida: se volvió pastor evangélico.
"Este grupo se desaparece, se esconde, se dan a la fuga y son prófugos dentro de la organización como también profugos de la justicia, ya que tenian orden de detención producto de esto y sabiendo que podia ser victima de asesinato y de otras circunstancias también es detenido por esta situación", explicó.
"Pero él decide tomar otro rumbo de vida, decide apartarse de los actos que tienen connotación delictiva violenta; homicidio, extorsión, uso de armas, con una vida dentro de lo que corresponde en el ámbito de la sociedad", añadió.
Pese a ello, el “Chimuelo” logró ser detenido por la PDI y, junto a “Zeus” que también está en la cárcel, arriesgan juntos hasta 300 años de prisión.
