Política

El rol de Andrés Chadwick para frenar un intento de suicidio en Rancagua

El rol de Andrés Chadwick para frenar un intento de suicidio en Rancagua
T13
Compartir
Hombre que amenazaba con tirarse de una torre de alta tensión pidió hablar con el ex ministro, a quien había conocido cuando era senador. Tras una extensa conversación, accedió a bajarse de la torre y fue llevado a centro asistencial.

Durante la jornada del lunes el ex ministro del Interior, Andrés Chadwick, vivió un tenso momento luego de recibir un llamado telefónico desde Rancagua.

Según se le informó al cercano colaborador del ex Presidente Sebastián Piñera, un trabajador de esa ciudad había subido a una torre de alta tensión y amenazaba con lanzarse desde gran altura. En ese contexto, decía que la única persona con la que conversaría sería Chadwick.

Chadwick conversó por cerca de 45 minutos con el hombre

Ante esto, el hoy presidente de la fundación Avanza Chile y ex senador por la Región de O'Higgins se dirigió a la zona y sostuvo una larga conversación de 45 minutos con el hombre, que ronda los 40 años de edad y que respondía al nombre de Ramiro.

Chadwick debió alzar la voz para conversar desde la base de la torre de alta tensión con Ramiro, con quien recordaron que se habían conocido durante el período de Chadwick como parlamentario, en el marco del trabajo con dirigentes vecinales de la población Vicuña Mackenna, una de las zonas vulnerables de la región. 

En ese contexto, el hombre pidió al ex ministro que no dejaran a los pobres abandonados. Tras la extensa conversación, accedió a ser rescatado y de acuerdo a información otorgada por el senador Alejandro García-Huidobro (UDI) al medio local El Rancagüino, estaba pasando por un mal momento psicológico.

Al descender de la torre de alta tensión en que se encontraba, le dio un abrazo a Chadwick y fue trasladado a un centro asistencial cercano. 

VIDEO | El rol de Andrés Chadwick durante un intento de suicidio en Rancagua

 

El antecedente de Heraldo Muñoz

Otro que vivió un momento similar fue el canciller Heraldo Muñoz. Corría el año 2002 y un hombre llegó hasta el palacio de La Moneda con la intención de dañarse a si mismo con un cuchillo.

"No estoy loco... quiero que alguien me escuche", decía bajo la mirada del entonces vocero de Gobierno del gobierno de Ricardo Lagos.

Tras el incidente, Muñoz planteó que se trataba de una persona "perturbada" por un "problema personal".

Etiquetas de esta nota