Este martes en la sala del Senado un gesto del candidato presidencial del PS, PR, PPD y el PC, Alejandro Guillier, llamó la atención en la oposición y el oficialismo: justo antes que los parlamentarios votaran frente al proyecto de acuerdo sobre Venezuela del senador DC Patricio Walker, el periodista se levantó de su puesto y se retiró por algunos minutos. ¿El resultado? No votó la iniciativa, que finalmente fue aprobada.
El proyecto de acuerdo planteó “desconocer la instalación de la denominada ‘Asamblea Nacional Constituyente’” impulsada por el Gobierno de Nicolás Maduro, “por constituir un ente ilegítimo en su origen y proceso de elección” y “repudiar la escalada de represión gubernamental que se ha traducido en más de 100 muertes”.
Además, el documento que no votó Guillier apuntó a pedir formalmente al Gobierno de Chile “que se solicite reuniones urgentes de alto nivel de organismos internacionales como la Organización de Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos y respecto de esta última, apoyar las acciones tendientes a invocar la Carta Democrática, a objeto de apoyar la vigencia del Estado de Derecho en Venezuela y animar a sus dirigentes a que busquen mecanismos de diálogo tendientes a solucionar la crisis política y humanitaria que afecta al país”.
La ausencia del parlamentario en la sala -quien después se reintegró para abordar el resto de la tabla del Senado-, generó críticas en la oposición, pero también tensión en el oficialismo.
La escena, además, evidenció las diferencias que genera el tema en el propio comando de Guillier, considerando que el Partido Comunista históricamente ha respaldado el proceso venezolano, al igual que el cubano.
Es más, el PC, donde milita la vocera de su comando Karol Cariola, ya había hecho noticia este lunes al rechazar la declaración emitida por la Cancillería chilena que cuestionó al gobierno de Nicolás Maduro.
Y si los comunistas criticaron al Ministerio de Relaciones Exteriores, la respuesta de otras colectividades del comando de Guillier profundizó las diferencias en la materia. El martes el Partido Radical y el PPD respaldaron la posición de Cancillería, mientras que Cariola evitó pronunciarse sobre la materia.
En tanto, previo a su ausencia en la votación, Guillier difundió un video por redes sociales en el que afirmó que en Venezuela no se ha llegado a una solución por falta de tolerancia de sectores del gobierno y de la oposición.
“Chile como los países de América Latina, deben hacer todos los esfuerzos para incubar una solución pacífica, que incluso puede representar finalmente la consulta a los ciudadanos para que decidan libremente y por el voto, como corresponde en una democracia, la mejor salida para la crisis en su país”, sostuvo el legislador, lo que se interpretó como una validación al cuestionado proceso electoral venezolano.
Cuba y Mariana Aylwin
El caso de Venezuela no es el primero que genera críticas hacia la postura del candidato.
Una situación similar ocurrió en febrero de este año, cuando Cuba prohibió el ingreso de Mariana Aylwin (DC), país al que asistiría para recibir un premio a nombre de su fallecido padre, el ex Presidente Patricio Aylwin. El reconocimiento era entregado por la Fundación Oswaldo Payá, disidente del régimen castrista.
Tras el hecho, la DC tuvo una fuerte reacción, generando una serie de pronunciamientos políticos y gubernamentales que condenaron la situación.
En este contexto, líderes de la DC emplazaron a quien en ese entonces se empinaba en las encuestas y aparecía como futura carta presidencial del oficialismo, el senador por Antofagasta.
Sin embargo, tras horas de presión, el comunicador sólo envió un mensaje por su cuenta de Twitter, a través del cual entregó “un saludo a Mariana Aylwin”, agregando que “como nos enseñó (Patricio) Aylwin: prudencia y diálogo para avanzar en más integración y democracia en América Latina”.
Su mensaje tuvo un tono similar al entregado este martes frente a Venezuela, y también generó duras críticas desde la oposición y sectores del oficialismo.
