Ed Sheeran lanzó este viernes su tercer disco "Divide" —estilizado como "÷"—. El sucesor de "x" (2014) cuenta con 12 nuevas canciones, de las que ya se conocen "Castle on the hill" y "Shape of you", con las que el británico espera volver a alzarse como uno de los músicos más rentables del pop actual.
Sin embargo, una edición de lujo de la placa le está dando algunos problemas al hombre de "Thinking out loud".
"Divide Deluxe" incluye cuatro temas extra llamados "Bibia be ye ye", "Nancy Mulligan", "Save myself" y "Barcelona". Esta última, con un contenido "libertino" que no ha gustado del todo en España.
Distintos medios de comunicación de aquel país han destacado la canción como "polémica", porque cuenta sus deseos de llegar a esa ciudad para bailar afuera de La Sagrada Familia —iglesia que lleva tatuada en su cuerpo—, beber sangría y enamorarse de una "mamasita rica" a la que "adora".
Independiente de la canción, "Divide" le traerá grandes réditos a Sheeran, porque podría convertirse en uno de los discos más vendidos en el Reino Unido este 2017.
O, al menos, eso es lo que proyectan las casas de apuestas, que se inclinan ante el colorado cantante como el más vendedor del año. Incluso, también lidera las preferencias sobre quién podría llevarse el próximo Grammy al Álbum del Año.
Con esos récords alrededor de su figura, Ed Sheeran volverá a Chile donde brindará dos conciertos: el 15 y 16 de mayo en Movistar Arena.
