El pasado fin de semana el animador Rafael Araneda tuvo que ser hospitalizado de urgencia y fue sometido a una cirugía tras presentar un fuerte dolor en su garganta.
De esta forma, el comunicador pasó el Día del Padre internado y recuperándose de la operación, donde le extirparon un pólipo.
Fue a través de su perfil de Instagram, donde está a punto de superar el millón de seguidores, que Araneda informó lo que le había ocurrido. "Ya me venía sintiendo mal y con un dolor fuera de lo común en mi garganta el miércoles pasado", comenzó diciendo junto a una foto en la que se muestra desde la camilla del hospital.
Y luego agregó: "Resumen: el doctor me manda al hospital para bajar la infección e hidratarme y aparece una sorpresita en uno de los exámenes: un pólipo que extirpar. Ayer al quirófano y todo salió muy bien y he tenido los cuidados necesarios".
El animador señaló que lo que le ocurrió no era para alamarse ni exagerar, pues era algo que su cuerpo ya conocía. "Hace años ya me habían operado de lo mismo, por alguna condición de mi sistema y producto mis hiperalergias que esto se repitiera con los años. Y así fue", añadió el conductor de 52 años.
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Tras haber pasado la peor parte, Rafael Araneda actualizó el martes sobre su estado de salud en la misma red social, y agradeció los cariñosos mensajes que ha recibido.
"De todo corazón muchas gracias por todas las muestras de cariño y las buenas energías que me han mandado y me siguen llegando. Les cuento que me han servido mucho para estar cada día un poco mejor y más cómodo. Sigo en modo silencio y reposo post cirugía. Abrazo de gratitud!!!", concluyó.
