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La increíble historia del hombre fingió su muerte para probar que su esposa planeaba asesinarlo

La increíble historia del hombre fingió su muerte para probar que su esposa planeaba asesinarlo
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Su mujer pretendía pagar un millón y medio para que un hombre asesinara a su esposo en Estados Unidos.

Ramón Sosa, un entrenador de boxeo, descubrió que su esposa Lulú contrató a un sicario para asesinarlo. Sin embargo, ideó un plan para atraparla: fingió su propia muerte.

La pareja estadounidense estuvo casada durante cinco años hasta que una crisis económica produjo que la esposa de Ramón le pidiera el divorcio, "pensé que lo solucionaríamos. Entonces de la nada Lulú dijo: 'Quiero el divorcio'", declaró Sosa a The Sun. 

Pese a la ruptura, la pareja no tenía dinero para vivir separados. Fue en ese período de tiempo en que Ramón se enteró del oscuro plan de su esposa: Lulú ofreció 1,3 millones de pesos para que un hombre asesinara a su ex marido.

"Las palabras quedaron suspendidas en el aire por una fracción de segundo y cuando comencé a procesar el mensaje, las palabras cayeron en mi cerebro una por una", mencionó Sosa al rotativo inglés. 

Aunque el plan de Lulú parecía perfecto, olvidó un gran detalle. El hombre al que pidió ejecutar el asesinato era un amigo de Ramón, quien no dudo en contarle la verdad sobre su esposa.

''Me di cuenta de que todavía tenía que vivir bajo el mismo techo con la persona que planeaba asesinarme",  sostuvo Sosa, quien intentó disimular su sorpresa para que Lulú continuara con el plan y así poder atraparla en el acto.

Paralelamente a que el plan seguía, Ramón se reunía con la policía para conseguir la evidencia que pudiera inculparla. Así fue como escondió un micrófono en la ropa de Lulú y, además, increíblemente, fingió su muerte. Uno de los policías le sacó una fotografía y luego se hizo pasar por sicario para mostrársela a su esposa. 

Sosa contó que "Lulú [se estaba riendo] cuando el oficial encubierto le mostró la foto. Ella tuvo el descaro de preguntarle si realmente estaba muerto o si me iba a levantar". La reunión con el policía fue el hecho que logró imputarla.

Finalmente la mujer fue detenida y se declaró culpable del delito de solicitud de asesinato ante el Tribunal de Distrito de Conroe, Texas, por lo que fue encarcelada por 20 años, pena que cumple desde el 2016.

Desde hace tres años, el hombre de 50 años se convirtió en un orador que defiende los derechos de los hombres violentados por sus parejas y escribió el libro "I Walked On My Own Grave".

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