AFP

El argentino Huracán y el colombiano Independiente Santa Fe empataron 0-0 la noche del miércoles en la primera final de la Copa Sudamericana-2015, jugada en el estadio Tomás Adolfo Ducó en Buenos Aires.

Con este resultado, el certamen se definirá en el desquite que se jugará el próximo miércoles en el estadio El Campín, en Bogotá (2.650 msnm), adonde el cuadro 'cardenal' tendrá la ventaja de la localía y la altura.

Huracán ejerció el dominio en los primeros minutos, a partir de la tenencia de la pelota y de la buena circulación, y pronto tuvo una buena oportunidad con una tijera de 'Wanchope' Ábila, que se fue cerca del poste izquierdo.

Sin embargo, ese manejo por parte del 'Globo' se hizo estéril porque Santa Fe supo esperarlo bien, el equipo de Gerardo Pelusso se mostró concentrado en cada acción, no se desordenó, retrocedió con orden y contó con un buen trabajo de los centrales Meza y Mina para rechazar todo por la vía aérea.

Incluso, el 'cardenal' contó con la mejor ocasión en su primera aproximación al área local, con un centro desde la izquierda de Seijas que Angulo cabeceó al ángulo, pero el balón rebotó en el larguero cuando el arquero Marcos Díaz sólo podía observar.

A partir de esa acción el encuentro se hizo más parejo, ya que Santa Fe empezó a discutir más el control del mediocampo, y Seijas halló espacios a espaldas de los volantes defensivos del 'Globo' para progresar, y fue justamente el volante venezolano el que inquietó con un bombazo de zurda de media distancia que encontró una sólida respuesta de Marcos Díaz.

Ábila tuvo la última del primer tiempo para el 'Globo' con una media vuelta que se fue por encima, y a pesar de su soledad en ataque -Espinoza aportó poco y Toranzo se cansó pronto-, el cordobés se las arregló para ser un factor constante de zozobra para el fondo colombiano.

De toma y dame 

En el arranque de la segunda parte, Róbinson Zapata salió a tiempo para salvar su valla cuando Ábila se disponía a cabecear en el área chica, y el delantero tuvo más chances en un derechazo alto de sobrepique, y cerca de los 65 minutos, en una media vuelta que sacó entre cuatro defensas y encontró la estirada de Zapata para desviar el remate que se metía en el rincón.

De su lado, Santa Fe tuvo más espacios para tratar de buscar contraataques, y por esa vía se aproximó con un centro de Perlaza que Angulo cabeceó muy alto, y con un pelotazo para Morelo, pero Nervo le quitó con esfuerzo el balón cuando el delantero se iba derecho hacia el arco, y cerca del final, Anchico cabeceó débil a las manos de Díaz.

Dentro de un desarrollo cerrado, Huracán intentó cuanto estuvo a su alcance, pero se encontró con un adversario rocoso, que le clausuró puertas y ventanas, y que hasta podría haberse ido con el premio mayor con un par de ocasiones.

En El Campín, Santa Fe tendrá la gran oportunidad de ir en busca de una corona internacional inédita, la primera para Colombia en la Copa Sudamericana, pero no deberá descuidarse ante un Huracán que aún sigue invicto en el certamen, y que intentará dar otro gran impacto como el que le propinó en la semifinal a River Plate, el campéon defensor.

Publicidad