Tras los lamentables incidentes registrados el pasado miércoles en el Estadio Libertadores de América, durante el partido entre Independiente y Universidad de Chile por Copa Sudamericana, la atención está puesta en la situación de los heridos y detenidos que permanecen en Argentina.
El ministro del Interior, Álvaro Elizalde, informó este viernes que de los hinchas que resultaron heridos, sólo quedan dos internados en el país vecino. En tanto, fueron liberados 104 personas que estaban detenidas, quienes ya pueden regresar a Chile, aunque muchos deberán tramitar en el Consulado un salvoconducto que les permita viajar, considerando que extraviaron o les robaron sus documentos.
Uno de los hinchas que fue liberado conversó con el canal argentino TyC Sports, acusando "torturas" por parte de la Policía trasandina y señalando que esto fue "un tema político".
Hincha acusa "torturas" de la Policía argentina
"Hicieron un llamado por altoparlante para salir del estadio, evacuar, en el cual iba saliendo mucha gente, y la Policía me hizo una zancadilla y me patearon entre tres creo y me llevaron detenido", expuso el fanático, mostrando heridas en su rostro que según él le provocaron los funcionarios policiales al otro lado de la cordillera.
El hombre, trasladado a la Comisaría Avellaneda N°4 de Sarandí, insistió que la Policía lo golpeó "a la salida, cuando había que evacuar", afirmando además que "nos torturaron".
"Más allá del tema futbolístico, fue un tema político. Todo el rato torturándonos", continuó, detallando lo que —según él— le decían los policías argentinos mientras lo golpeaban.
"Chileno vendepatria, traicionero. Por eso te digo, más allá de un tema de fútbol, es un tema político también todo esto", afirmó.
Por otra parte, el hincha acusó a la Policía de mentir para justificar la supuesta golpiza.
"Nos mintieron. Nos dijeron que habíamos matado a una niña de 5 años y que por eso nos iban a pegar", declaró en la televisión argentina.
Asimismo, tras su liberación, dijo que "no me entregaron mi celular, pero recuperé mis documentos, que era lo más importante para poder viajar. Pero hay gente que no tiene cédula de identidad, no tiene teléfono".
Finalmente, apuntó a lo que considera que fue una "mala organización" del partido.
"Esto es una mafia. La gente del Rojo hizo lo que quiso, pasó por donde quiso para llegar hasta donde estábamos nosotros y la Policía ahí mirando, sin hacer nada, cómplices completamente", expresó.
"La organización mala, malísima. Yo fui el día anterior a Racing-Peñarol, no hubo ningún problema. Todo como debía ser. La Policía resguardando a la hinchada visitante, doble barrera perimetral para ellos, todo bien", cerró.
