Un duro golpe recibió el tenis chileno este martes. Y es que Nicolás Jarry (78°), la segunda raqueta nacional, fue suspendido provisionalmente por la Federación Internacional de Tenis (ITF), luego de arrojar doping positivo en una muestra realizada durante la Copa Davis, en noviembre pasado.
El laboratorio acreditado por la Agencia Mundial Antidopaje (WADA), en Montreal, Canadá, encontró en el análisis de la muestra el metabolito SARM LGD-4033 (Ligandrol) y el metabolito Stanozolol. Ambos se encuentran en la categoría S1 Agentes Anabolizantes de las sustancias prohibidas por la Agencia Mundial Antidopaje.
Los anabolizantes son sustancias que favorecen el crecimiento de los tejidos y, en el caso de los deportistas, su uso es ilegal pues favorece el aumento de la musculatura y la capacidad de almacenar energía.
En su descargo, el “Príncipe” asegura que “los niveles de estas sustancias son tan increíblemente bajos que equivalen a una trillonésima parte de un gramo, niveles tan bajos que ninguna sustancia podría haberme proporcionado ningún beneficio para mejorar mi rendimiento”.
Jarry apunta a un posible caso de contaminación cruzada de unas multivitaminas fabricadas en Brasil que su médico le recomendó tomar, por lo que en los próximos días trabajará en demostrar su inocencia.