Los encargados de abrir la penúltima noche del Festival de Viña del Mar son Los Bunkers. La banda nacional volverá a pisar el escenario más importante de nuestro país, luego de las aclamadas presentaciones en 2007 y 2012.
Tras varios años separados, Los Bunkers se reunieron para realizar gira por todo el país. Para la noche de este jueves, los oriundos de Concepción compartirán la jornada con el humorista Sergio Freire y Young Cister, en la calificada como "Noche chilena".
La banda penquista volverá al escenario viñamarino para tocar sus más clásicos temas, entre los que se encuentra "Llueve sobre la ciudad".
Esta clásica canción, cuenta con un desconocido y siniestro origen, el cual fue relatado por uno de sus integrantes.
El origen "Llueve sobre la ciudad" de Los Bunkers
El tema fue lanzado en 2005 y catapultó la carrera de la banda de Concepción, convirtiéndose en uno de sus más clásicos temas.
Fue el propio Mauricio Durán, guitarrista y una de las voces de la banda, explicó en su libro “Canción para mañana: Memorias de Los Bunkers”, que la canción nació gracias a la película Ray (2004), que retrata la vida de Ray Charles.
“Le pedimos a Francis (Durán) que intentara un solo al estilo de las viejas canciones de rhythm and blues. Y lo hizo. Se podría decir que el solo de “Llueve sobre la ciudad” es una respetuosa imitación que Francis hizo de Ray Charles”, señaló.
Según sus palabras, la letra de la canción apuntaba originalmente a contar la historia de un tipo “con el agua hasta el cuello”.
“Voy caminando sin saber nada de ti, ni siquiera el agua que rodea mis pies puedo sentir”, dice el éxito, que hace referencia a que en un inicio, el agua comienza en los pies hasta subir por el cuerpo y terminar colapsando y ahogando a las personas en sus problemas. Aunque eso fue cambiando con el tiempo.
Luego de encontrar el manuscrito del hit, Mauricio Durán afirmó que se dio cuenta de que la lluvia “fue lo último en aparecer”, pero debido a los días de invierno, se les ocurrió agregarlo.
El significado de la canción de Los Bunkers
“La muerte es mi felicidad, lo sé muy bien, hoy a considerarla una vez más y más que ayer”, relata el éxito.
En el libro, el guitarrista de Los Bunkers cuenta la anécdota de un niño de unos 5-6 años que cantó para ellos la canción, pero al momento de hacer mención a la muerte, Durán se cuestionó la letra.
Además, señaló que “sentí una especie de golpe en el pecho. Una mezcla de incomodidad y tristeza que tuve que disimular por buena educación”.
Este suceso significó que se cuestionara que las letras e ideas que expresa la música quedan en una “capa” de nuestra humanidad: “Visiones no solo del amor, sino también de la amistad, la política, en fin, de todas las dimensiones de la vida, y de la muerte también”.