Un hito en toda regla. Fue una de las noticias excluyentes de la Cuenta Pública de este jueves, aunque no tenía que ver con su contenido: las 3 horas y 36 minutos que ocupó el Presidente Gabriel Boric para exponer ante el Congreso Pleno superaron las 3 horas y 10 minutos de Patricio Aylwin en 1993, que eran el récord de duración desde el retorno a la democracia en 1990.

  • Sin embargo, un análisis histórico en fuentes oficiales y de prensa apuntan a un récord aún mayor: según información consultada por Ex-Ante, los 216 minutos de Boric superan a cualquier cuenta pública al menos desde que se implementó la Constitución de 1925, es decir, en casi un siglo. De hecho, al menos hasta 1924 no existen registros de que otra cuenta pública haya superado las tres horas de duración, además de la de Aylwin en 1993.

Las fuentes de información. Para reconstruir la duración de las cuentas públicas desde 1925 a 1973 -en que el hito se celebrara el 21 de mayo-, Ex-Ante recurrió tanto a los diarios de sesiones del Congreso, disponibles en el sitio de la Biblioteca Nacional, como al archivo digitalizado del diario La Nación, que cuenta con datos hasta 1964.

  • En la mayoría de los casos, la información contenía uno de dos elementos: o la duración de la sesión misma -que incluye la apertura y cierre formal por parte de quien preside; es decir, es más larga que el discurso mismo-, o derechamente el cálculo hecho por la prensa del tiempo de la exposición del mandatario.

Sin precedentes. Pero incluso con el cálculo más amplio, ninguna de las cuentas públicas registradas en ese período se acerca a la de Boric este año. Por ejemplo, la sesión del Congreso Pleno para escuchar a Salvador Allende en 1973 duró 127 minutos, dos menos que el año previo, que fue su récord personal. El antecesor de Allende, Eduardo Frei Montalva, fue uno de los que tuvo el promedio más alto de duración: ninguna de sus seis cuentas públicas bajó de las dos horas, y su último mensaje, en 1970, llegó a las dos horas con 41 minutos.

  • El otro mandatario cuyos discursos no bajaban de las dos horas, según los registros, fue Arturo Alessandri Palma durante su segundo mandato. Aquí hay una curiosidad: la Cuenta Pública de 1938, famosa porque el diputado Jorge González Von Mareés -vinculado al nacionalsocialismo chileno- disparó un balazo en pleno Salón de Honor, duró alrededor de dos horas y media incluyendo ese incidente; es decir, una hora menos que el discurso de Boric en 2023. Tanto Alessandri Palma como Frei Montalva, además, compartían el enviar extensos documentos con anexos a sus discursos, que superaban las 200 páginas, aunque los discursos en sí mismos se resumían en 40 o 50.

Los mandatarios de breves palabras. En el otro extremo aparece Carlos Ibáñez del Campo, quizás el más sintético. En sus seis cuentas públicas entre 1953 y 1958, nunca superó los 70 minutos de extensión, ocupando incluso sólo 40 en 1958. Pero “El Caballo” tiene otro hito: en su primer gobierno, entre 1928 y 1931, no leyó en ninguna de las cuatro ocasiones su mensaje ante el Congreso Pleno, sino que optó por enviar el documento escrito y omitir el tradicional discurso.

  • De similar brevedad era Juan Antonio Ríos, quien, en su primera cuenta pública, en 1942, ocupó sólo 27 minutos. En ese período ocurrió otra particularidad: el mensaje de 1946 fue leído por el vicepresidente Alfredo Duhalde, dado que Ríos estaba con permiso por enfermedad. El mandatario terminaría falleciendo el 27 de junio de ese año, poco más de un mes después.
  • El único otro caso de un vicepresidente dando una Cuenta Pública fue Ibáñez en 1927, pero con particularidades: ya estaba a cargo del país tras la renuncia de Emiliano Figueroa, y ese mismo día se desarrollaba la votación que lo terminaría ungiendo formalmente como Presidente. Antes, en 1925, no se había realizado la instancia ante el turbulento clima político, que terminaría con el cambio constitucional de ese año.

La incógnita. En el diario La Nación del 22 de mayo de 1924 se hace mención a que la cuenta pública de Arturo Alessandri Palma, que sería la última de su primer mandato, “duró tres horas”. Es la primera vez en que algún dato se equipara, aunque sea a distancia, a las 3 horas y media que ocupó Boric para su discurso. Ya más hacia atrás, las fuentes son más complejas de consultar. Pero los datos apuntan a que la exposición del jueves 1 en Valparaíso podría haber sido la cuenta pública más larga de un Mandatario no sólo en tres décadas, sino en al menos 100 años.

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