Eduardo "es amigo de los hijos de (Donald) Trump, habla inglés, habla español, tiene una vivencia muy amplia en el mundo. A mi modo de ver, puede ser una persona adecuada y podría perfectamente encargarse del trabajo en Washington", declaró el mandatario a periodistas después de un evento oficial en Brasilia.

La decisión depende de su hijo, añadió, porque para asumir el cargo en Washington tendría que renunciar a su mandato como diputado federal. El nombramiento está sujeto además a la aprobación del Senado. 

"No nos llegó una propuesta oficial", afirmó Eduardo Bolsonaro a periodistas, pero agregó: "Si el presidente me confía esa misión, estaría dispuesto a renunciar a mi mandato".

El más joven de los tres hijos del mandatario que se dedican a la política se mostró optimista, pese a que reconoce que nunca perteneció a la escuela diplomática.

"Me imagino cómo será del otro lado, pienso en el pueblo estadounidense viendo al presidente de un país que envía a su hijo para trabajar allí. Hablo inglés, hablo español, soy el diputado más votado en la historia de Brasil, soy presidente de la comisión de Relaciones Exteriores en la Cámara de Diputados. Creo que mis credenciales me dan una cierta cualificación", aseguró. 

La posibilidad fue revelada un día después que Eduardo Bolsonaro cumpliera 35 años, edad mínima exigida para ser embajador de Brasil en el extranjero. 

Durante una transmisión en vivo por Facebook, Bolsonaro comentó con su canciller Ernest Araújo, sobre la posibilidad. Entre risas cómplices, el ministro respondió: "Excelente nombre". 

Durante la campaña y los primeros meses de gobierno, Eduardo Bolsonaro fue un activo articulador del gobierno con los representantes de la ola neocoservadora mundial, operando en muchos casos como una especie de canciller informal. 

Acompañó a su padre en viajes internacionales y durante la visita oficial a Estados Unidos, en marzo, fue el único representante brasileño que participó junto a su padre durante la reunión privada con Donald Trump en el Salón Oval de la Casa Blanca, pese a que Araújo también era parte de la comitiva. 

Publicidad