La universidad peruana a cargo de los ensayos de una vacuna china contra el COVID-19 negó el domingo que el expresidente Martín Vizcarra fuera voluntario del estudio, tema que desató una tormenta política en el país.

La Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH), a cargo de la investigación de la vacuna de la china Sinopharm en el país sudamericano, dijo que "el investigador principal informó (a las autoridades sanitarias) que el señor Martín Vizcarra y la señora Maribel Díaz Cabello no forman parte del grupo de 12.000 voluntarios sujetos de investigación", y que se han cumplido todos los protocolos.

La aclaratoria de la casa de estudios fue en respuesta a las declaraciones del expresidente Martín Vizcarra de esta semana. "Tomé la decisión, valiente, de sumarme a los 12.000 voluntarios" que participarían en el ensayo, dijo.

Pero este mismo domingo el expresidente emitió un comunicado insistiendo en que recibió las dos dosis de la vacuna como sujeto del ensayo clínico, mostrando además imágenes de lo que afirma es su "cartilla de control" del "ensayo clínico de Fase III Vacuna SARS-CoV-2".

Por ello expresó "gran extrañeza" ante el comunicado de la UPCH de que no se halla entre los voluntarios del ensayo clínico.

A su juicio, haber participado en la experimentación "no ha implicado perjuicio de nadie y menos del Estado. No se ha obtenido ventaja alguna ya que se trataba solo de un proyecto".

Concluye resaltando que "todas las acciones narradas no han significado falta administrativa ni delito", pero advierte que están siendo usadas por "los enemigos del país con intención de desacreditar". El exmandatario, de 57 años, es candidato al Congreso en las próximas elecciones de abril.

Vizcarra quiso justificarse tras la revelación de un diario según el cual, siendo presidente (2018-2020), había sido vacunado en secreto, unas semanas antes de que fuera destituido por el Congreso en noviembre pasado en un juicio político relámpago.

En primera instancia dijo que no lo había hecho público porque "los voluntarios deben mantener la reserva" sobre el ensayo, y contó que también había sido vacunada su esposa, Maribel Díaz. 

"Hacer pública mi participación hubiese puesto en riesgo el normal desarrollo de la Fase III", agregó este domingo.

Esta polémica incidió en que la ministra de Salud, Pilar Mazzetti, en el cargo desde julio de 2020, renunciara este viernes cuando el Congreso se preparaba para promover su censura y destitución, pese a que manifestó no conocer nada sobre el proceder del exjefe de Estado.

Muy golpeado por la segunda ola de la pandemia, Perú inició esta semana la vacunación contra el covid-19 entre el personal sanitario, dos días después de que llegaran las primeras 300.000 dosis de Sinopharm.

El gobierno interino de Francisco Sagasti aspira a vacunar a 10 millones de personas antes de finalizar su período constitucional en julio, y anunció que ya están contratadas 48,24 millones de dosis de vacunas, de las que se han recibido un millón.

Perú acumula hasta este sábado 43.491 fallecidos por COVID-19, con 1,22 millones de casos confirmados y 1,13 millones de personas recuperadas. 

El sistema de salud se encuentra saturado con 14.222 hospitalizados y un déficit de 20% en la demanda de oxígeno medicinal.

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