Este sábado, se conoció que el hombre, que había sido detenido por supuestamente haber iniciado un incendio forestal en Maule, quedó libre por falta de pruebas.

En un primer momento, se informó que el sujeto había sido sorprendido intentando iniciar el fuego, versión que posteriormente fue descartada por la Fiscalía, que ordenó su liberación.

El caso se originó la noche del jueves, cuando Carabineros detuvo a un hombre de 43 años en la Ruta K-620, cruce Numpay, tras una denuncia de vecinos.

En ese momento, se señaló que el individuo habría sido visto agachado y con un encendedor, presuntamente intentando prender pasto seco en un sector cercano al incendio forestal que ha consumido más de mil hectáreas.

Sin embargo, tras el control de detención, el Ministerio Público determinó que no existían pruebas suficientes para sostener la imputación.

Acusado de iniciar incendio forestal: "No me encontraron nada”

La fiscal adjunta, Claudia Díaz, explicó que en el parte policial no se consignaba la presencia de un encendedor, contradiciendo la información entregada inicialmente.

A ello se sumó lo expuesto por la defensa, que apuntó a inconsistencias en la descripción física y la vestimenta del detenido, además de la inexistencia de elementos para iniciar fuego.

Por estos motivos, el hombre quedó en libertad la mañana del sábado, tras haber pasado la noche en la cárcel de Talca.

Luego de ser liberado, el imputado habló con la prensa en el que relató cómo ocurrió su detención y negó cualquier participación en el incendio. Según explicó, se encontraba durmiendo cuando fue abordado por personal policial.

“Al primero que acusan, o sea, al primero que ven ahí lo acusan de cualquier cosa”, señaló, agregando que había llegado al sector luego de ser trasladado por los propios carabineros. “Yo estaba durmiendo en una carpa y llegaron y me subieron al carro. Nada que ver mi vestimenta con lo que decían”, afirmó.

El hombre también descartó haber portado un encendedor. “¿De qué encendedor iba a estar saliendo? No me encontraron nada”, dijo, asegurando que se enteró de las acusaciones una vez detenido.

En su relato, explicó que había pasado un mal momento durante su detención y su estadía en la cárcel, aunque reconoció que -dado que vive en la calle- al menos pudo comer y pasar una noche bajo techo. “Fue un mal rato, más encima salir en la tele y que digan cosas que no son. Yo se lo dejé a Dios”, expresó de manera humilde.

El imputado también manifestó su preocupación por el impacto que la acusación pudo tener en su familia y en personas cercanas, reiterando que no tuvo participación alguna en el incendio forestal investigado.

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