Carla Hernández, nieta de María Ercira Contreras, adulta mayor que despareció en mayo de 2024, recordó cómo celebraban tradicionalmente las Fiestas Patrias en familia y lamentó no poder compartir nuevamente estos momentos con su abuela, quien permanece aún desaparecida.
En conversación con Página 7, Hernández relató los detalles que marcaban los festejos: “Mi abuela amaba las Fiestas Patrias, y yo no concibo celebrar sin ella. Preparaba la carne, tenía varias salsas para el choripán, pebre y chancho en piedra. Cantaba canciones dieciocheras, le gustaban Los Huasos Quincheros y hasta bailaba cueca” recordó.
La joven también rememoró cómo su abuela ayudaba en la cocina: “Ayudaba con la masa de las empanadas junto a mi mamá. Disfrutaba ver a sus bisnietos vestidos con trajes típicos y le encantaba la carne asada que ponía mi papá en la parrilla”. Hernández resaltó que lo que más disfrutaba su abuela era reunir a la familia, especialmente cuando podían asistir todos sus hijos.
Fiestas Patrias marcadas por la ausencia de María Ercira
Para Carla Hernández, este 18 de septiembre se vivió con un profundo sentimiento de tristeza: expresó que, aunque intentan mantener la celebración por el bienestar de los niños, la ausencia de su abuela hace que las festividades sean incompletas.
La joven manifestó su frustración con la investigación, señalando que sienten que la situación familiar ha sido devastadora: “Siento que nos destruyeron la vida porque si ella hubiese tenido realmente un accidente, es algo que se puede aceptar y hacer un duelo, pero aquí hay un ocultamiento evidente y una investigación frustrada. Y obviamente los responsables son los investigadores".
Hernández también criticó la gestión de las diligencias judiciales, mencionando que en agosto se detectó que un trabajador del Fundo Las Tórtolas sacó una bolsa de basura con un peso irregular, situación que requirió la declaración urgente de los empleados. Sin embargo, la familia aún no sabe si esta acción se concretó.
Sobre la entrega de pruebas, la nieta denunció retrasos preocupantes: "Nuestra salud mental cada día más deteriorada, mucha angustia e incertidumbre al no saber qué está pasando. Y lo peor es que nos dimos cuenta de que jamás se rescataron las 24 horas que solicitó la fiscalía. Solo había dos horas más de grabación extra que tampoco las teníamos, tuvimos que insistir para que las entregaran", relató.
Finalmente, Hernández lanzó un fuerte llamado de atención sobre la negligencia en la investigación asegurando que “la injusticia es evidente" y que el caso "se tiene que hacer conocido a nivel internacional por la negligencia".