Un desgarrador caso de abandono infantil fue revelado este lunes por T13: seis niños fueron dejados por su madre en la toma del Paso La Mula, en Alto Hospicio, Iquique.

Los menores, de entre 3 y 15 años, quedaron completamente desamparados luego que la mujer encontrara trabajo y formara una nueva relación.

Las imágenes difundidas por T13 muestran la extrema precariedad en la que vivían los niños: sin acceso a agua potable, ni luz, ni baño, en una vivienda construida con materiales livianos, sin ventanas, techo ni cercos. 

Los menores no solo quedaban expuestos a las inclemencias del desierto, sino también a grupos de crimen organizado que operan en la toma, donde se han registrado secuestros y homicidios.

Según la fiscal Virginia Aravena, de la unidad de género de Alto Hospicio, la madre visitaba muy rara vez a sus hijos. Ante la falta de alimentos, el hermano mayor, de 15 años, asumió la responsabilidad de cuidar y mantener a sus hermanos menores, trabajando en construcción para proveerles comida.

Una vecina del sector relató la situación que vivían los menores y en conversación con T13, detalló, “varios vecinos habían visto a los niños en la calle, o a altas horas de la noche, los niños pedían agüita”.

La gravedad del abandono quedó en evidencia cuando uno de los niños se fracturó el brazo y no pudo ser operado porque no había ningún adulto que se responsabilizara de él. Además, solo tres de los menores estaban escolarizados y, debido a la distancia hasta la escuela, asistían con muy poca regularidad.

La realidad que viven ahora los niños

Tras la denuncia, las autoridades intervinieron y rescataron a los menores, quienes fueron trasladados a tres hogares de protección. La madre fue detenida y formalizada por abandono de menores, quedando en prisión preventiva.

“Están a lo menos en tres hogares distintos, pero eso como un mal menor en este momento, porque estaban en tan malas condiciones, en un lugar sumamente peligroso, yo no sé si la la gente dimensiona el lugar en el que estaban ellos”, concluyó la fiscal Virginia Aravena.

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