“Acá hay un ataque para obstaculizar la acción del gobierno, por lo tanto, no quiero que mi persona sea un obstáculo, y le planteé al Presidente la posibilidad de renunciar y, a pesar que intentó persuadirme, aceptó mis argumentos".

Con estas palabras el hasta hoy ministro del Interior, Víctor Pérez, anunció su renuncia al cargo. Esto luego que la Cámara de Diputados aprobara la acusación constitucional en su contra  por 80 votos a favor y 74 en contra. 

Una de las preguntas que ha surgido tras la renuncia del ministro es qué pasará con el libelo en su contra, que había pasado al Senado.

Lo cierto es que la acusación sigue su curso, ya que la propia Constitución permite acusar a autoridades hasta por seis meses desde que dejan su cargo. Otra cosa es el escenario político, donde podría darse el escenario que el libelo perdiera fuerza tras la salida de Pérez. Pero para esto habrá que esperar. 

Al titular de Interior se le acusa de actuar "con una excesiva tolerancia los hechos de bloqueo de rutas" de los camioneros y de una reacción tardía frente al caso del joven de 16 años que cayó desde el Puente Pío Nono tras una embestida por parte de un funcionario de Carabineros.

¿Qué viene ahora?

Cámara notifica al Senado y al acusado

Una vez aprobada la acusación en la Cámara, la corporación deberá nombrar una comisión de tres representantes para que formalicen el libelo y este prosiga en el Senado.

La Cámara Baja tendrá un plazo de 24 horas para formalizar de este trámite tanto al Senado como al acusado, quien si bien había quedado suspendido del cargo, esta medida ya no tendrá validez luego que presentara su renuncia.

Senado inicia trámite

Una vez que se dé cuenta de la acusación, el presidente del Senado deberá fijar el inicio del análisis del texto en un plazo de entre cuatro a seis días, y destinará sesiones especiales diarias para analizar su contenido.

La comisión de diputados será la encargada de formalizar la acusación. En tanto, el ministro o su defensa contarán con un espacio para presentar sus descargos, ya sea de forma verbal o escrita. 

Los diputados miembros de la comisión especial tendrán derecho a réplica, y el acusado, a dúplica, detalla el artículo 50 de la Constitución.

Una vez realizado este proceso, se fijará la votación del libelo para la siguiente sesión especial del Senado.

El día de la votación

Ese día los senadores votarán cada capítulo de la acusación por separado, donde se le acusa de haber infringido la Constitución y las leyes frente al paro de camioneros y se le cuestiona su rol tras las manifestaciones sociales.

Basta con que se apruebe uno de los capítulos para ejercer las sanciones que contempla el mecanismo. A modo de ejemplo, en 2013, solo se aprobó el capítulo que acusaba a Beyer de omitir el cumplimiento de las obligaciones ministeriales, particularmente la de fiscalizar el lucro.

A diferencia de la Cámara -donde bastaba la mayoría más un voto- en el Senado se requiere de dos tercios de los legisladores. 

¿Qué pasa si se aprueba la acusación?

En caso que la Cámara Alta apruebe la acusación, la autoridad será destituida de su cargo y no podrá ejercer empleos públicos por cinco años. 

En este caso, si prospera el texto, Pérez solo quedará inhabilitado para ejercer cargos públicos, puesto que renunció al cargo.

Los últimos dos ministros que habían sido destituidos han sido titulares de Educación: Harald Beyer, en 2013, y Yasna Provoste, en 2008.

Caso aparte es el del ex ministro del Interior, Andrés Chadwick, cuya acusación se aprobó cuando este ya había dejado el cargo, por lo que solo procedió la inhabilidad para ejercer cargos públicos por 5 años.

Publicidad