Desde agosto de 2025, los usuarios en Chile pueden identificar fácilmente las llamadas comerciales, de estafas o spam, gracias a la implementación de una nueva normativa de prefijos telefónicos. Esta medida busca proteger a los consumidores y brindar mayor transparencia en las comunicaciones comerciales, estableciendo una clara diferencia entre las llamadas solicitadas y las no solicitadas.
De acuerdo con la regulación, se definieron dos prefijos específicos para distinguir el tipo de llamada:
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Prefijo 809: identifica todas las llamadas automatizadas o masivas que no han sido solicitadas ni autorizadas por el usuario del dispositivo móvil.
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Prefijo 600: corresponde a las llamadas comerciales o informativas que sí han sido solicitadas o autorizadas previamente por el usuario.
No obstante, la aplicación de esta normativa ha generado cierta confusión entre la ciudadanía. Muchas personas, al visualizar los nuevos prefijos 809 o 600 en su pantalla, optan por no contestar o cortar la llamada, creyendo que ambos números se tratan de publicidad no deseada o intentos de fraude.
Ante esta situación, el Ministerio de Salud (Minsal) realizó un llamado a la calma y recordó la importancia de no rechazar las comunicaciones oficiales. Bajo la campaña “¡No cortes!”, la entidad aclaró que las llamadas provenientes del número 600 006 1022 pertenecen a Salud Responde, su servicio de atención telefónica.
Hay que recordar que el prefijo 600 corresponde a las llamadas comerciales o informativas que sí han sido solicitadas o autorizadas previamente por el usuario y no son spam.
El ministerio advirtió además: “Si recibes otro número diciendo ser Salud Responde, puede ser una estafa”, enfatizando la necesidad de verificar siempre los canales oficiales antes de entregar información personal.
Asimismo, el Minsal reiteró: “Si recibes un SMS, WhatsApp o llamado desde nuestros números oficiales, respóndelo con confianza: es parte de un trabajo nacional para mantener la información al día y fortalecer la comunicación con las personas del sistema de salud.”
Con esta aclaración, la autoridad sanitaria busca evitar malentendidos y fortalecer la confianza en los mecanismos de comunicación directa entre el Estado y los usuarios del sistema de salud, en un contexto donde las estafas telefónicas y digitales continúan en aumento.
