El Estado chileno entrega un importante beneficio económico a las mujeres que hayan tenido hijos biológicos o adoptivos, y que actualmente se encuentren jubiladas. Se trata del Bono por Hijo, un aporte cuyo objetivo es aumentar el monto de la pensión que reciben las mujeres a partir de los 65 años.
A diferencia de otros subsidios, este bono no se entrega al momento del nacimiento del hijo, sino que se incorpora como un incremento en la pensión una vez que la mujer accede a su jubilación. Según la normativa, el beneficio aplica tanto para quienes tienen hijos biológicos como adoptados.
A continuación, te contamos en qué consiste este aporte, cuáles son sus montos actualizados para 2025, y qué condiciones deben cumplirse para poder obtenerlo.
¿De cuánto es el Bono por Hijo en 2025?
El valor de este beneficio varía dependiendo de la fecha de nacimiento de los hijos:
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Para las madres cuyos hijos nacieron antes del 1 de julio de 2009, el bono equivale al salario mínimo vigente en julio de ese mismo año. Según los registros oficiales, ese monto corresponde a $165.000 por cada hijo.
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En el caso de los hijos nacidos después del 1 de julio de 2009, el bono se calcula como el 10% de 18 ingresos mínimos mensuales, considerando el monto del salario vigente en el mes de nacimiento del hijo.
Actualmente, con un ingreso mínimo mensual de $529.000, el bono podría alcanzar hasta $952.200 por hijo para aquellas madres que cumplan con todos los requisitos establecidos.
Requisitos para acceder al Bono por Hijo
Para acceder a este beneficio, las interesadas deben cumplir con los siguientes criterios:
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Tener 65 años cumplidos y ser madre.
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Estar afiliada a una AFP y haber comenzado a recibir pensión desde el 1 de julio de 2009 en adelante.
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En caso de no estar afiliada a un régimen previsional, debe recibir una Pensión de Sobrevivencia con Aporte Previsional Solidario de Vejez, otorgada por una AFP, compañía de seguros o el Instituto de Previsión Social (IPS), a partir de la misma fecha.
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Recibir actualmente la Pensión Garantizada Universal (PGU).
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Contar con 20 años de residencia en Chile, ya sea de manera continua o discontinua desde que cumplió 20 años.
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Haber residido en el país al menos cuatro de los últimos cinco años anteriores a la solicitud del bono.
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Tener cédula de identidad vigente.
