Por 80 años fue todo un enigma para la ciencia. Sin embargo y tras un largo proceso de estudio, investigadores encontraron finalmente a la ‘rana de Hall’ (Telmatobius halli) en un afloramiento de aguas termales en las cercanías de Ollagüe, en pleno desierto de Atacama.

Si bien no se conocen mayores detalles de esta especie exclusiva de Chile, de comprobarse que solo habita en el reducido sitio donde fue redescubierta, podría clasificarse en “peligro crítico de extinción”, recoge la Universidad Católica de Temuco.

En 2015, investigadores de la Universidad Católica de Temuco, el Centro de Investigación para la Sustentabilidad de la Universidad Andrés Bello y la Universidad Austral de Chile, iniciaron una expedición al altiplano, cerca de Ollagüe.

Este viaje los llevó a Aguas Calientes, sitio donde hay un afloramiento de aguas termales que rondan los 28ºC, y que no abarcaban más de 100 metros cuadrados. Allí habitaban unas ranas cuya apariencia acusaba su pertenencia al género Telmatobius. Luego de los análisis de rigor, recibieron la confirmación que tanto esperaban: se trataba de las mismas ranas de Hall que no habían sido reportadas por la ciencia en más de 80 años, hallazgo, que fue publicado hace pocos días en la revista científica Zootaxa.

“Este estudio redescubre a la rana Hall, que estuvo perdida para la ciencia por 80 años. Como no se conocía con certeza su localidad tipo (“aguas termales en las cercanías de Ollagüe”), esta especie fue considerada como una especie fantasma, de la cual se estaba dudando de su existencia en la actualidad”, dijo Claudio Azat, director del Doctorado en Medicina de la Conservación de la Universidad Andrés Bello.

“Nuestro estudio detecta con claridad la localidad tipo: Aguas Calientes en el salar de Carcote, desde donde Frank Gregory Hall colectó el primer espécimen en 1935. La especie se ha mantenido viva por 80 años en el mismo (muy reducido) hábitat. Los estudios taxonómicos son importantes porque solo se conserva lo que se conoce”, precisó Azat.

En el caso de la rana de Hall, el académico detalló que “en dos jornadas de trabajo solo encontramos tres adultos (dos hembras y un macho) y tres renacuajos de T. halli. Es un número muy pequeño, lo que indica que la población local es muy reducida”, precisa el sitio web especializado Ladera Sur.

En cuanto a una descripción más detallada de su morfología y de otros aspectos básicos de la especie, el autor principal del estudio, César Cuevas Palma, quien es académico del Departamento de Ciencias Biológicas y Químicas de la Universidad Católica de Temuco, explicó que en la actualidad “el estado del conocimiento es bastante pobre. Falta mucho que investigar y conocer sobre esta especie, y en general sobre todas las especies de Telmatobius del norte de Chile”.

En este sentido, sostuvo que “nosotros prospectamos una muy pequeña área en la parte norte del Salar de Carcote y los animales estaban ahí, en un área no mayor a 100 metros cuadrados, muy pequeña. Ahora, al menos, sabemos algo de su morfología externa, conocemos sus larvas, algo de la ecología, pero desconocemos aspectos importantes de su reproducción”.

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