La Semana Santa -y particularmente el Domingo de Resurrección- es una época de reflexión y también de chocolate, ya que una de las tradiciones más frecuentes es la de repartir huevitos.
Sin embargo, lo que para adultos y niños humanos es un momento feliz y dulce, para nuestras mascotas puede representar un gran riesgo. Por si no lo sabías, el chocolate es tóxico tanto para perros como para gatos.
Esto se debe a la teobromina, un compuesto que se encuentra en el cacao y nuestras mascotas metabolizan de manera mucho más lenta que los humanos. Esto provoca que se acumule en sus cuerpos y termine siendo tóxica con complicaciones que pueden provocar problemas en el sistema nervioso central o el sistema cardiovascular, llegando incluso a la muerte.
Obviamente, el primer consejo es que tengas mucho cuidado y no dejes por ningún motivo que tus perros o gatos consuman chocolate, pero, ¿qué pasa si ya lo hicieron?
Semana Santa: ¿Qué hacer si mi mascota consume chocolate?
Actúa de inmediato. Apenas sepas que tu perrito o gatito comió chocolate debes buscar ayuda veterinaria.
Es importante que intentes dilucidar qué tipo de chocolate comió tu mascota, en qué cantidad y cuándo. Incluso, si lo tienes a mano, es aconsejable guardar el envoltorio para mostrárselo al profesional a cargo. Considera que por regla general los chocolates más amargos son más peligrosos para los animales.
Intenta llevar a tu mascota al veterinario cuanto antes y sigue sus instrucciones. No intentes hacer que tu perro o gata vomite sin tener indicaciones del profesional.
El portal MyVet enfatiza en que actúes cuanto antes, ya que a veces los síntomas no se presentan inmediatamente y pueden tardar horas. "Los primeros minutos son claves para un buen pronóstico", indican.
Síntomas de Intoxicación por Chocolate en Mascotas
Si sospechas que tu mascota ha comido chocolate, mantente atento a los siguientes síntomas, que pueden tardar algunas horas en aparecer:
- Vómitos y diarrea.
- Aumento de la sed y micción.
- Jadeo excesivo e inquietud.
- Ritmo cardíaco acelerado.
- Temblores musculares.
- Convulsiones.
- En casos graves, fallo cardíaco y coma.