Chile, 2018: El viaje que cambió el papado de Francisco
Un antes y un después. “Un viaje complicado”. Así describía el Papa Francisco en su autobiografía la visita a Chile en enero de 2018. Un comentario breve, escueto, al inicio de un capítulo donde relata el inédito matrimonio entre dos asistentes de vuelo que celebró a bordo del Airbus de Latam que lo transportó por el país.
- La realidad, sin embargo, es que el peregrinaje a Chile fue mucho más que complicado, como coinciden los principales vaticanistas y biógrafos de Jorge Mario Bergoglio. Para la periodista argentina Elisabetta Piqué, el viaje “marcó un antes y un después”, mientras que para el vaticanista italiano, Iacopo Scaramuzzi, “cambió la agenda del Papa”.

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Complicado desde el comienzo. El viaje se preveía complejo desde un inicio. El propio secretario de Estado, Pietro Parolin, lo señaló en la tradicional entrevista que da en la víspera de cada viaje papal. Para algunos, la Iglesia chilena venía sufriendo una pérdida de influencia y la confianza estaba debilitada por casos de abusos de sacerdotes.
- En el Vaticano confiaban que la presencia del Papa ayudaría a revertir esa situación. Nunca imaginaron el panorama que encontrarían.
- “Las multitudes de otros viajes se revelaron en un recuerdo desgarrador frente a las explanadas con amplios espacios vacíos”, escribió el periodista Massimo Franco.
- Pero el escaso fervor observado en la visita, que contrastaba con el recuerdo del viaje de Juan Pablo II en 1987, estuvo lejos de ser el tema que convirtió el viaje a Chile en un parteaguas.

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Impasse en Iquique. La razón de esto último estuvo en Iquique, donde Francisco desvirtuó las denuncias contra el obispo Barros –“el día que me traigan pruebas, hablamos”, dijo- instalando la duda sobre su compromiso real en la lucha contra los abusos. Sus palabras desataron una tormenta.
- No sólo fue cuestionado por las víctimas de Karadima, sino que el cardenal Sean O’Malley, referente de la lucha contra los abusos, sacó una dura declaración cuestionando al Papa, en un hecho inédito.
Mal informado. A partir de ahí comenzó la preparación de una estrategia de crisis. Hasta entonces, escribía Robert Mickens, vaticanista de La Croix International, “los partidarios (del Papa) superan ampliamente a sus detractores”, pero, agregaba, “eso puede estar a punto de cambiar”.
- Y todo por cómo Bergoglio había abordado el tema de los abusos en Chile. A su llegada a Roma se decidió el envío de una misión especial a Santiago, a cargo del arzobispo maltés Charles Scicluna, para investigar el tema.
- El informe elaborado por el prelado llevaría luego al Papa a emitir una carta a los chilenos reconociendo su error y asegurando que había sido mal informado.
AFP - Papa Francisco
Renuncia masiva de obispos. A partir de entonces los acontecimientos se sucedieron aceleradamente. El Papa invitó a las víctimas de Karadima a Roma y convocó a todo el episcopado chileno a una cita especial en el Vaticano que terminó con la renuncia de todos los obispos.
- A partir de ese momento, el tema de los abusos sexuales copó su agenda. Hasta entonces el principal problema del Papa provenía de los sectores conservadores y los cuestionamientos a su apertura a la comunión de los divorciados vueltos a casar.
- Sin embargo, desde los sucesos en Chile fueron los sectores progresistas los que comenzaron a criticarlo, como recordó entonces el diario The Guardian.
Una visita que provocó un cambio de agenda. El informe sobre los abusos en Pennsylvania, conocido a mediados de 2018, solo meses después de la visita a Chile y el posterior viaje a Irlanda, otro país golpeado por la pedofilia en el clero, obligaron a Francisco a concentrar su atención en ese tema.
- Así, un año después del viaje a Chile y Perú, convocó a la primera cumbre de los presidentes de las conferencias episcopales del mundo entero para debatir sobre la forma de abordar el tema.
- Ese fue, según muchos vaticanistas, el mejor ejemplo del efecto que tuvo la visita a Chile. Un mes después de esa cita el Papa emitió la carta apostólica Dos Motu Proprio, endureciendo las medidas contra los abusos sexuales.

