Las autoridades chinas advirtieron a las empresas taiwanesas del peligro de respaldar la independencia de ese territorio, horas después de que los reguladores continentales hayan multado a un conglomerado de esa isla.
Las tensiones entre los dirigentes comunistas y el gobierno democrático de Taipéi han ido en aumento en los últimos años, en los que Pekín ha redoblado la presión diplomática, militar y económica sobre este territorio que considera propio.
Pekín "nunca permitirá a la gente que apoya la 'independencia de Taiwán' y daña nuestras relaciones que venga a hacer dinero en China continental", dijo la Oficina de Asuntos de Taiwán (TAO) en un comunicado emitido el lunes por la noche.
El texto respondía a informaciones publicadas por la agencia estatal Xinhua de que la empresa taiwanesa Far Eastern Group fue multada por violar la regulación local en algunas de sus inversiones.
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Far Eastern, uno de los mayores conglomerados de esa isla con negocios en el textil, la construcción, los hoteles o la venta minorista, fue sancionado con 13 millones de dólares.
"El amplio número de compañías taiwanesas deben distinguir lo bueno de lo malo, mantenerse firmes en su posición trazando una línea contra las fuerzas separatistas por la 'independencia de Taiwán'", dijo en el comunicado Zhu Fenglian, portavoz de la TAO.
Los analistas interpretan esta iniciativa como un intento de incrementar la presión económica sobre las firmas de Taiwán que operan en China.
