Nueva regulación sobre "narcofunerales": Solo 24 horas entre velorio y sepultura
El reciente anuncio en el Diario Oficial sobre la reglamentación emitida por el Ministerio del Interior ha establecido medidas más estrictas para el manejo de los llamados “narcofunerales”, un fenómeno que ha representado un grave desafío para las autoridades de seguridad pública en nuestro país. Esta nueva legislación, que entró en vigor este viernes, tiene como objetivo regular estos funerales asociados a actividades delictivas y reducir los riesgos que representan para el orden público.
Uno de los primeros aspectos destacados de la reglamentación es la definición de lo que constituye un “delito de riesgo”. Según el nuevo marco legal, se considerará de alto riesgo cualquier funeral que implique una amenaza para la seguridad pública. Esto incluye, entre otros factores, si el fallecido tiene antecedentes penales, ha sido miembro de una organización criminal o está vinculado al crimen organizado.
En cuanto a los procedimientos, Carabineros de Chile tendrá un plazo de hasta 12 horas para evaluar y entregar un informe técnico sobre el funeral tras conocer el deceso. Si el funeral se considera de alto riesgo, la Delegación Presidencial Regional deberá tomar acción en un plazo de 24 horas desde la notificación, ordenando la inhumación o cremación del cuerpo. En el caso de que el cuerpo esté en el Servicio Médico Legal, el plazo comienza una vez que el fiscal emita la orden para entregarlo.
En qué consiste el proyecto que regula funerales de alto riesgo y que se convertirá en ley
Nueva regulación para funerales narco: Coordinación con cementerios
La reglamentación también establece que, en coordinación con Carabineros y los cementerios, se tomarán medidas para reducir el impacto del funeral en la comunidad. Esto incluye establecer horarios diferenciados y garantizar que no haya alteraciones para otros deudos presentes en los cementerios.
Además, se intensificarán los controles para prevenir conductas peligrosas como lanzamientos de fuegos artificiales o disparos al aire, comunes en algunos de estos funerales. Carabineros deberá asegurarse de que se tomen medidas preventivas en todas las etapas del funeral, desde el traslado del cuerpo hasta su inhumación o cremación.
El reglamento también permite que cualquier persona pueda denunciar, de forma anónima, la posibilidad de que un funeral implique riesgos para la seguridad pública. De ser necesario, Carabineros investigará y evaluará el evento en cuestión.
