Derrota electoral y táctica. “Es evidente que el resultado del Plebiscito constituye una derrota electoral y táctica que, de no evaluarse en profundidad y con un sentido autocrítico, puede tener efectos retardatarios en el tiempo”.

Estudiar el voto del Rechazo. “Debemos direccionar y conservar correctamente la voluntad transformadora de casi 5 millones de chilenas y chilenos que optaron por aprobar la propuesta constitucional; son una base de cambio que no puede ser soslayada. Pero, también debemos asumir plenamente el desafío de caracterizar con rigurosidad el 60 % que votó rechazo”.

Autocrítica por efecto del voto obligatorio. En el Comité Central se habló de una derrota por “causas multifactoriales” y que deben analizarse fenómenos coyunturales y estructurales, así como abordar “autocríticamente el diseño de campaña y la capacidad del partido de asumir plenamente las múltiples tareas que implicaba” todo el proceso del plebiscito.

  • “Resulta claro que no sólo no previmos acertadamente la incorporación masiva de un nuevo electorado en este proceso, sino que principalmente no caracterizamos acertadamente el comportamiento y las expectativas de estos sectores movilizados por la obligatoriedad del voto”.

Factor económico y manejo del gobierno. El Comité Central, de acuerdo a El Siglo, consideró el contexto en que se desarrolló el plebiscito, con una situación inflacionaria y de recesión económica golpeando a la población y el efecto de la negativa del gobierno a un quinto retiro desde las AFP, que el partido impulsó. También se evaluó el comportamiento del Ejecutivo en distintas materias, los problemas de seguridad pública, el impacto de la pandemia, entre otras materias.

“La Convención alimentó los relatos de miedo”. “Más allá de los errores cometidos, que requerimos evaluar, la Convención propuso al pueblo chileno un texto transformador, valorado así a nivel internacional. Pero, la Convención con algunos de sus errores también alimentó los relatos de miedo y las distorsiones que el Rechazo explotó”.

Fake news y control de medios. “La derecha, política y económica, ocupó todo su aparato hegemónico para denostar desde el día uno a la Convención, y consolidó un relato en abril de este año. Fuertemente afianzado en la falsificación de sus contenidos, planificó y desarrolló una campaña mediática, en defensa de sus privilegios y para impedir, una vez más, las transformaciones democráticas, que encontró eco en los medios de comunicación hegemónicos, calando hondo en amplios segmentos populares”.

  • “Poner particular atención respecto de los fenómenos del control de medios y las fake news, ya que son una estrategia que seguirá ocupando la derecha”.

“Quieren desmantelar nuestro programa de gobierno”. “La derecha utilizará su resultado (del plebiscito) para contener la agenda transformadora del gobierno, tal como ya se ha anunciado respecto de las Reformas Tributaria, Previsional y, sin duda, respecto de la Agenda Laboral y Económica comprometida”.

  • “Debemos poner atención al actuar de la derecha, que no solo busca limitar y entorpecer el nuevo proceso constituyente, sino que además pretende el desmantelamiento de nuestro programa de gobierno”.

Defensa al programa y a Boric. “Es momento de ampliar nuestro apoyo, respaldo y defensa de nuestro gobierno, de su programa y del presidente Gabriel Boric. Continuaremos siendo férreos defensores del programa y sus compromisos con el pueblo. Sabemos que llevar adelante las transformaciones que nos hemos propuesto para Chile, sería un desafío enorme, pero estamos convencidos que es el mandato que el pueblo nos ha dado y que es la única vía para articular una efectiva defensa de la democracia, amenazada por la ampliación de las dinámicas fascistas y de ultraderecha que pretenden amenazar los avances democráticos conquistados por la lucha popular”.

La vía es una Convención y el proceso no puede radicarse solo en el Congreso: “Continuaremos promoviendo y defendiendo la continuidad del proceso constituyente, por medio de una Convención Constitucional que debe mantener los estándares democráticos equivalentes, es decir participativa, con paridad de género, con escaños reservados, con participación de independientes, una Convención que respete como elemento fundamental la soberanía popular y ciudadana”.

  • “La continuidad del proceso constituyente, no puede estar sólo radicada en la discusión del Congreso Nacional, sino que esta debe contar con respaldo de la movilización social que pueda apuntalar las definiciones por venir”.

La tesis de los extremos. “Debemos incorporarnos plenamente a este nuevo proceso, e incidir enérgicamente en estos temas sin permitir que se nos excluya ni aísle, que es lo que quiere la derecha con esta posición de veto a nuestro partido”.

  • En este marco, según señala El Siglo, el Comité Central estima que su rol será “poner el acento en la contradicción neoliberalismo-democracia, en términos de contenidos programáticos y constitucionales que releven el valor del trabajo en la sociedad y los derechos laborales colectivos, vinculados a superar las limitaciones vigentes a la Libertad Sindical, particularmente a la negociación colectiva y el derecho a huelga”.
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