Más allá de que el FA y el PC se plegaron a la decisión de la oposición de estudiar una acusación para destituir a Piñera, en una reunión del domingo entre FA-PC y el jefe del comando de Boric, Giorgio Jackson, concordaron centrarse más bien en presionar a la Fiscalía. A las dudas sobre si hay antecedentes suficientes para una acusación, se suma que algunos estiman que el golpe ya fue demasiado demoledor para el oficialismo y Sichel como para mover más las aguas cuando Boric lidera las encuestas. Pero la presión de diputados que van a la reelección podría empujar la acusación.

Qué observar: Las bancadas de oposición desde la DC al FA-PC concordaron en una reunión de este lunes iniciar el estudio de una acusación al Presidente Piñera, tras la revelación de los Pandora Papers en Ciper, donde se conoció que el último pago de la venta de una parte de la minera Dominga en 2010 estaba sujeto a que no hubiera cambios regulatorios que dificultaran la instalación de la mina. El FA, PC y regionalistas verdes fueron parte de la decisión, aunque su declaración del domingo no hizo ninguna mención a una acusación.

  • El texto FA-PC indicó que los hechos son de la “mayor gravedad toda vez que comprometieron acciones públicas para beneficios privados”; presionan a la Fiscalía a indagarlos (indicando eventuales delitos); y comprometen acciones de fiscalización, afirmando que la cláusula de pago no había sido parte de la investigación que realizó en 2017 la Fiscalía en la que no hubo cargos a Piñera, pese a que Ciper aclaro más tarde que sí fue parte de la indagatoria.
  • “El Ministerio Público debe investigar eventuales delitos de cohecho, negociación incompatible, evasión tributaria, perjurio y presión indebida”, agregan. Y Boric se plegó a señalar a que buscarán “hacer valer la responsabilidad en este caso”.
  • La declaración FA-PC se acordó en una reunión del domingo entre Jackson y los partidos, en la que concordaron avanzar en acciones fiscalizadora de la magnitud “lo más alta posible”; es decir, dependiendo de los antecedentes judiciales que existan.
  • Pero la conclusión de la reunión opositora de este lunes fue un poco más allá: se acordó “poner equipos jurídicos a disposición para iniciar el estudio de una acusación”, afirmó el diputado Jaime Naranjo (PS) como vocero, aunque precisando que se presentará “si es que corresponde hacerlo de acuerdo a los hechos que recopilemos”. En la cita, no hubo reparos desde el FA.

Qué significa: El FA-PC se plegó a estudiar a una acusación constitucional contra Piñera, manteniendo por ahora en reserva las dudas jurídicas y políticas que advirtieron en su reunió del domingo, confirman distintas fuentes FA-PC: por eso mismo es que ese día solo concordaron esperar qué acciones toma la Fiscalía y que antecedentes encuentra (y eventualmente presentar una querella para presionar las indagatorias), antes de mencionar la opción de una acusación.

  • En su reunión del domingo se inclinaban más bien por una comisión investigadora: las dudas sobre una acusación se relacionaban a:
  • Mérito jurídico: además de que no estaba claro si la Fiscalía había conocido de la cláusula en 2017, varios esgrimieron que se requiere conocer antecedentes del algún acto de Gobierno que hubiese favorecido que se concretara esa cláusula. En el comando de Boric afirman que no avanzarán con alguna acción fiscalizadora que no tenga sustento legal: para ello, abogados del FA-PC están elaborando informes.
  • Viabilidad política: otra razón que primó en la cita fue no hacer una acción testimonial en el Congreso, que podía no contar con los votos suficientes (parte de la DC se ha descolgado de varias acusaciones y en el Senado se requieren 2/3). Ello se ve subsanado en parte por la presencia de la DC en la reunión del lunes (aunque Gabriel Silber no comprometió los votos DC).

Lo que hay detrás: El factor que se esgrimió en la reunión entre Jackson y los partidos -afirman presentes- fue que debían tomar una “decisión responsable” ante la alta posibilidad de que el FA-PC y Boric sean gobierno; más aún, considerando que comunicacionalmente el golpe a Piñera (y por extensión a Sichel y Chile Vamos) ya es un hecho y su sector ya está pagando los costos. Aunque nadie lo explicitó, algunos entendieron que la idea detrás es no alterar el cuadro político-electoral actual cuando nadie duda de que este ya favorece a Boric con miras a llegar a La Moneda.

  • En la oposición algunos estiman que una acusación podría ser vista como una maniobra demasiado flagrante para incidir en el curso de la elección presidencial, que entre a abrir un cuestionamiento sobre el resultado de la elección: de ingresarse esta semana, se votarían solo algunos días antes de la votación del 21/11.
  • A nadie que gane la próxima elección le conviene la situación de inestabilidad política que significaría la remoción de Piñera, cuando le quedan solo 6 meses; ello mientras Boric ha optado en las últimas semanas por evitar mover aguas, dada su pole position. “Él no tiene que hablar. Es como una esfinge en torno a la cual tú descubres significados. Frei el 93’ fue un poco así”, afirmó el analista Eugenio Guzmán.

Ojo con: Las dudas en sectores del FA y el comando de Boric en ningún caso descartan por completo que la presión electoral de los diputados que no van a la reelección termine forzando a Boric a respaldar la acusación: no sería primera vez que su bloque fuerza a Boric a tomar una decisión durante la campaña.

Lo que viene: En la mañana de este miércoles se volverán a reunir los diputados tanto del FA-PC como de Nuevo Pacto Social (bloque de centroizquierda de Provoste), para decidir un curso de acción.

  • En la cita se revisarán los informes jurídicos para definir cómo avanzar: quienes esperan que se presente el libelo afirman que la idea es que se vote antes de las elecciones.
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