Este miércoles el exdirector de la Policía de Investigaciones (PDI) Héctor Espinosa fue declarado culpable por delitos de malversación de caudales públicos, falsificación de instrumento público y lavado de activos.
Quien también fue condenada por la justicia es la esposa del exdirector, María Magdalena Neira, como autora también de lavado de activos.
Los hechos por los que se le consideraron culpable sucedieron entre 2015 y 2017, cuando se desempeñaba como director de la institución. Espinosa habría contado con la ayuda de su supuesta mano derecha y subordinado, Eduardo Villablanca, quien sería el encargado de retirar los dineros malversados.
En su paso por la dirección de la PDI, Espinosa desvió los gastos reservados de la Policía de Investigaciones a su cuenta personal y al de su esposa. El monto total corresponde a $146 millones con los que compraron una casa en la comuna de Las Condes que deberá ser entregada al Fisco.
Espinosa arriesga 20 años de presidio
Los magistrados que componen la sala de audiencias 803 del Cuarto Tribunal Oral en lo Penal ratificaron la condena y Espinosa arriesga 20 años de presidio. Por el delito de malversación son diez, por el de falsificación de instrumento público son cinco y por lavado de activos, otros cinco años.
Su esposa, cuya defensa argumentó desconocimiento respecto al lavado de activos, podría recibir 546 días de presidio menor, que incluso podrían ser cumplidos con arresto domiciliario.
Además, deberán pagar las costas de lo que ha implicado el proceso judicial, lo que se acercaría a 200 UTM, es decir, al rededor de $13,9 millones. La lectura de la sentencia, no obstante, será leída el 1 de diciembre.
El caso finalizará a más de cuatro años de que el Consejo de Defensa del Estado presentara una querella en contra de Espinosa, luego de que se detectaran los depósitos en efectivo realizados en las cuentas de él y de su esposa.