Si bien este martes 30 de junio dieron a conocer su divorcio, lo cierto es que el matrimonio de Ben Affleck y Jennifer Garner estaba mal desde hace bastante tiempo y la separación se habría dado 10 meses atrás.
De acuerdo a lo que han contado cercanos a ellos, hicieron terapia por harto tiempo y estuvieron a punto de separarse antes de la llegada de su último hijo, Samuel, hoy de 2 años. Sin embargo, ese nacimiento los hizo darse una nueva oportunidad... aunque no sería por mucho más tiempo.
Según el portal TMZ, el actor tiene aficiones por el alcohol y las apuestas. Y aunque no son en extremo, le habrían afectado en su rol de casado y en el estilo de vida que cada uno de los involucrados en el matrimonio quería llevar.
Affleck y Garner duraron diez años casados y tienen tres hijos: Violet (10), Seraphina (6) y Samuel (2).
