De vez en cuando aparecen noticias insólitas y esta es una de ella.
Se trata de la historia de Tasha Davies, una mujer de 28 años, que el pasado martes debió ser ingresada a un hospital tras presentar fuertes dolores abdominales.
Sin embargo, lo que parecía ser una molestia en el estómago terminó siendo algo inesperado para ella y su círculo cercano.
Estaba embarazada.
Según consigna Liverpool Echo, la mujer terminó dando a luz a un hijo completamente sano, quien se llamó Alexander Isaac Gohan Hern.
"Fue una mezcla de conmoción y sorpresa. No tuve náuseas matutinas y no experimenté ningún síntoma (...) unas 24 horas antes que viniera (al hospital), mi estómago se hinchó mucho", dijo la mujer.
En ese sentido, relató que comenzó a sentir molestias como contracciones, pero no las lograba identificar o asociar como tal.
Además, asociaba su aumento de peso a los bocadillos que había ingerido en medio de la cuarentena provocada por el coronavirus.
Pero al llegar al recinto asistencial en compañía de su pareja, Martin Hern, le hicieron un test de embarazo para descartar cualquier posibilidad, lo que arrojó resultados positivos.
"Estábamos absolutamente en shock cuando llegó", dijo.
Tras esto, pasaron cerca de 15 minutos cuando la mujer debió ingresar a trabajo de parto.
Afortunadamente, el bebé nació completamente sano y ya está rodeado por su familia en su domicilio.
