Solo durante los meses de agosto y septiembre, 12 personas se quitaron la vida en el Metro de Santiago, una cifra alarmante que refleja la creciente crisis de salud mental en el país.
Según datos del Ministerio de Salud, en 2024, Chile registró 10,3 suicidios por cada 100 mil habitantes, casi el doble de los homicidios cometidos en ese período.
La llegada de la primavera, con sus días más soleados y la naturaleza florida, también ha traído consigo un desafío oculto: la depresión estacional, que afecta a muchas personas con el cambio de estación. En medio de esta compleja realidad, surge la historia de Natalia, una joven que decidió tomar acción ante el doloroso fenómeno de los suicidios y la indiferencia de algunos usuarios del metro.
Natalia, diseñadora de profesión, pero apasionada por la psicología, vio en las reacciones de los pasajeros una falta de empatía, lo que la llevó a decidir convertirse en un refugio emocional para aquellos que necesitaban ser escuchados o recibir un simple abrazo. "Fue una noticia muy fuerte, sobre todo ver los comentarios y las reacciones de la gente que no eran del todo empáticas ni positivas. Entonces, a raíz de eso, quise ponerme las pilas, por así decirlo, y organizar algo que pueda, aunque sea, ser un abracito al corazón para algunas personas", expresó Natalia a T13 Finde.
La joven no dudó en criticar el individualismo que, según ella, domina la sociedad moderna. "Hay poca empatía. Siento que nos hemos robotizado un poco en ese sentido. Las personas que lamentablemente toman estas decisiones son personas que probablemente hayan sentido mucho dolor en ese momento y hacerlo en un lugar como este tiene sus razones, sus motivos. Entonces, es un tema bastante fuerte. Es un tema complicado", reflexionó.
"Puedes hablarme si lo necesitas": Una iniciativa que busca prevenir el suicidio
Con un cartel en mano que rezaba: "¿Tuviste un mal día? Puedes hablarme si lo necesitas, el abrazo es gratis. Una campaña para que decidas quedarte en prevención del suicidio y la depresión", Natalia se situó en la estación Baquedano del metro, brindando apoyo a aquellos que lo necesitaban. La iniciativa, que lleva el nombre "Puedes Hablarme Si Lo Necesitas", tiene su propio perfil en Instagram y nació del deseo profundo de Natalia de ofrecer un mensaje de esperanza y comprensión.
"Esta propuesta generó mucha interacción y finalmente me decidí a convertir ese deseo en una realidad", compartió emocionada. Aunque Natalia no ha podido estudiar psicología de manera formal, la joven asegura que ser un hombro que guía desde el corazón es lo que realmente la hace feliz.
El objetivo de Natalia va más allá de ofrecer un simple abrazo o palabras de consuelo. Con el apoyo de profesionales, su sueño es crear espacios donde las personas puedan reunirse, recibir ayuda psicológica a bajo costo y sentirse respaldadas. "Que los profesionales puedan brindar ayuda a un bajo costo, porque también eso hemos hablado bastante con ellos y quizás llegar a ser algo bastante grande, algo que deje una huellita en este largo país” señaló.
Durante su jornada en la estación Baquedano, Natalia compartió momentos de conexión genuina con muchas personas, especialmente mujeres mayores de 60 años, quienes se acercaron en busca de un abrazo. "Las mujeres de unos 60 años para arriba fueron las que se acercaron, pero también fueron las que pidieron el abrazo, no las que querían conversar específicamente", relató la joven.
Con la intención de expandir su propuesta, ha comenzado a producir chapitas distintivas para voluntarios que puedan replicar la labor de apoyo que ella inició. Además, busca crear una red de profesionales dispuestos a ofrecer servicios de ayuda psicológica accesibles, contribuyendo a un cambio real en la forma en que la sociedad aborda el suicidio y la salud mental.