Una falla en el avión presidencial obligó a modificar los planes de la comitiva del Presidente Sebastián Piñera. 

Tras finalizar las actividades en la región del Biobío, Piñera tenía contemplado trasladarse hacia Isla de Pascua a bordo del Boeing 767-300 de Presidencia. 

Sin embargo, una falla en esta aeronave obligó a dejarla en Santiago. Es por ello que el Mandatario tuvo que abordar el jet Gulfstream G-IV de la Fach para llegar a la isla en horas de esta tarde. 

En tanto, la prensa que cubre las actividades del jefe de Estado viajará a Santiago para luego abordar un avión Hércules que los llevará al mismo destino, aunque con varias horas de diferencia respecto del itinerario original. 

Este miércoles Piñera tendrá actividades por la entrada en vigencia de la ley "que regula el ejercicio de los derechos a residir, permanecer y trasladarse hacia y desde el territorio especial de Isla de Pascua"

Un historial de fallas

El episodio de este martes se suma al largo historial de fallas del avión de La Moneda. La más reciente fue en junio de 2017, cuando la entonces Presidenta Michelle Bachelet tenía contemplado viajar a Canadá para reunirse con el primer ministro Justin Trudeau. El desperfecto obligó a la comitiva a tomar distintas aeronaves.

En 2015, en tanto, fueron tres fallas las que obligaron a enviarlo a reparaciones. La más comentada, la que se registró en Auckland, Nueva Zelanda, donde se realizaba una escala técnica tras la gira a Filipinas en el marco de la Apec 2015.

El 767-300 fue presentado por la Fuerza Aérea en septiembre de 2008 y tuvo un costo de 48 millones de dólares de la época. En ese entonces, la FACH destacaba la autonomía de 11 mil kilómetros, permitiendo ahorrar un día y medio de viaje en las giras presidenciales a Asia. 

Sin embargo, a menos de un año de su llegada la nave ya presentaba desperfectos. El 1 de abril de 2009, una fuga de aceite obligó a la comitiva a permanecer cerca de 12 horas en las Islas Canarias. Si bien la Presidenta Bachelet no viajaba en ese avión, la situación generó críticas por parte de pasajeros, dentro de los cuales se encontraban parlamentarios y empresarios que la acompañaban a visitar la Federación Rusa.

Otro episodio se registró en marzo de 2012, cuando el mismo 767-300 vivió un complejo aterrizaje en el marco de la gira del entonces Mandatario, Sebastián Piñera, a Asia. 

De acuerdo a La Segunda, la delegación vivió un "susto" durante la última escala, en el aeropuerto de Haneda, Tokio, debido a problemas en el tren de aterrizaje. Luego que otra nave se aproximara para descartar desperfectos, el avión pudo aterrizar. Según el medio, hubo temor entre la delegación.

En marzo de ese mismo año se produjo un desperfecto en el 737-500. El avión se dirigía a Lima, donde Piñera participaría de una cumbre de jefes de Estado. En una escala en Iquique se percataron que la nave presentaba problemas de filtración de combustible, por lo que se debió enviar al 767 desde Santiago para continuar el viaje. 

Es debido a estas fallas que a mediados de 2014, el 767 fue enviado a Estados Unidos para que fuera sometido a una serie de reparaciones. Ahora vuelve a estar en medio de la polémica tras este nuevo imprevisto en Nueva Zelanda.

Publicidad