“En ninguna parte de la biblia se menciona”: Teólogo explica origen de tradición de no comer carne en Semana Santa
Para Semana Santa, personas de la comunidad cristiana optan por no comer carne (de vacuno, cerdo, pollo, pavo, etcétera), y en su reemplazo, consumen pescados y mariscos.
Cada año, se registran aglomeraciones en lugares como el terminal pesquero, donde cientos de chilenos acuden para adquirir este tipo de productos.
Sin embargo, a pesar de que se trate de una tradición muy instaurada en los hogares chilenos, su origen es un tanto desconocido.

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Ni la Biblia ni las autoridades del catolicismo plantean una prohibición sobre el consumo de carne en Semana Santa, ni tampoco el Viernes Santo en particular. La tradición obedece más bien a una muestra de abstinencia y sacrificio.
Semana Santa: ¿Por qué se tiene la tradición de no comer carne?
El teólogo Marcial Sánchez explicó a T13.cl que “en ninguna parte de la Biblia se menciona que no se debe comer carne en la Semana Santa. Vale la pena agregar que esta tradición tendría sus orígenes en el siglo II, cuando los primeros cristianos empezaron a tratar de purificarse, tomando como referencia a Jesús, que ayunó durante 40 días”.
Por su parte, Luis Lira, profesor de historia internacional de la Universidad Finis Terrae, complementó que “este periodo de 40 días comienza con el Miércoles de Ceniza, una vez que se terminan los carnavales, y es un tiempo de preparación para finalizar con el Domingo de Pascua, el hito que señala la resurrección de Cristo”.
En este sentido, Sánchez señaló que “se instauró una tradición que simula la honra a la penitencia del hijo de Dios. Por tanto, una jornada de penitencia también es una vía de purificación, ritual, y el consejo de la iglesia es la abstinencia. Entonces ya desde el siglo II se plantea que una buena forma de abstenerse es no comer carne, que era el producto más caro de la época”.
En la actualidad, esta tradición podría quedar obsoleta considerando que “generalmente, el precio de pescados y mariscos sube mucho más en Semana Santa, y al final uno termina comiendo un plato más caro y ostentoso frente al sacrificio y austeridad que quiere darle uno a esos días”, indicó el profesor Luis Lira.
“Y también, en tiempos pasados, al no existir refrigeración, comer carne fresca era un lujo. Eso hacía que esto fuera un plato bien preciado y que hoy día en nuestros tiempos a lo mejor, pensando en algo así, podríamos reemplazarlo por no comer chocolate, no comer dulces. Algo que sea de buen sabor y que permita hacer un ayuno o sacrificio en esos días”, planteó.

